jueves, 28 de abril de 2011

Tengo la firme convicción, de que si estás me consolido,
Y la sospecha de que ni sospechas cuanto te amo

martes, 26 de abril de 2011

Tú me dices yo te digo.
Y así empieza nuestra guerra cotidiana
Yo me armo de adjetivos
Tú conjugas el peor de mis pasados.
Y te apunto dónde duele
Y te acuerdo el peor de tus pecados
Tú reviras la ofensiva
Y disparas donde sabes que haces daño.
Y en el campo de batalla
Quedan muertos los minutos que perdemos
Tú me dices,yo te digo,
Y así acaba nuestra guerra cotidiana
Esta guerra sin cuartel que nadie gana.
Porque hablamos
Y no usamos ese tiempo en darnos besos
En pintarnos con las manos
Las caricias que queremos
Y que no nos damos
Porque siempre hablamos
De lo tuyo y de lo mío
Del pasado y los culpables
Mientras muere otro minuto
Porque hablamos.
Ya te dije que no es cierto
Ya dijiste que tú no eres lo que digo
Nadie cree, nadie acepta
Cada quien defiende su utopía
Y el fantasma de la duda
Se abre paso en la frontera del futuro
Y el presente moribundo
Se consuela con lo poco que nos queda.
Y te quiero ,y me quieres
Pero somos más idiotas que sensatos
Y aparece otro día
Y nos van quedando llagas incurables
De esta maldita enfermedad de hablar de más.
Porque hablamos
Y no usamos ese tiempo en darnos besos
En pintarnos con las manos
Las caricias que queremos
Y que no nos damos
Porque siempre hablamos
De lo tuyo y de lo mío
Del pasado y los culpables ~

sábado, 23 de abril de 2011

Odio no tenerte cerca y que no me hayas llamado. Pero sobre todo odio no poder odiarte porque no te odio ni siquiera un poco, nada en absoluto.



Preferiría ser un poco más,

poco mas dura para soportar.

Tener que verte así como si nada.

Después de haberte dicho que ya te he olvidado,

que eres parte de un pasado

al cual no quiero recurrir.

Nunca más.

miércoles, 20 de abril de 2011

Una pregunta me mantuvo despierta
a las dos de la mañana, ¿me quieres?
Me pregunté hasta que estuve completamente despierta
Seguí dando vueltas
Deseando que estuvieras ante mi puerta
Y que cuando la abriera dijeras “Hey”
Estuve encantado de conocerte
Todo lo que puedo decir es que
fue encantador conocerte




{Te amo}

domingo, 17 de abril de 2011

He conocido en mi un sentimiento que ni siquiera yo sabia que existía, por lo menos no con esa fuerza. He descubierto que no necesito tenerte para quererte, que quizás sea esa la esencia del maldito amor, y que quizás sea este el precio que hay que pagar por sentirlo. He comprobado que en el camino encuentras a personas dispuestas a quererte, pero yo solo he sabido ir hacia atrás y he acabado perdiéndolas. Hoy no quiero a nadie que no seas tú. Y no me culpo, ni siquiera te culpo a ti. No me castigo, ni me martirizo por eso. No me da miedo. No albergo esperanzas, albergo recuerdos y puede que ahí prevalezca mi error. Hace tiempo dejé de tener el derecho de estar,pero que aunque tu no quieras permaneceré siempre, hasta cuando creas que he dejado de hacerlo. Aposté por nosotros y siempre me alegraré de haberlo hecho porque en esa etapa de mi vida hiciste que vivir mereciera aún más la pena. A pesar de las peleas, a pesar de los terceros. Aquí tienes una sonrisa que será siempre para ti, aquí tienes cada momento si algún día te da por recordar, aquí estaré siempre.


Tal vez yo no sea la persona más importante en tu vida, pero sólo espero que cuando escuches mi nombre sonrías y digas esa persona fue mas que importante para mi.

jueves, 7 de abril de 2011

En el fondo hay cosas que nunca llegarás a decir por miedo. En realidad todos somos un poco cobardes cuando se trata de decir algo que nos importa demasiado.Que las cosas que importan de verdad son las que se dicen con una mirada, un gesto, una sonrisa... Hasta hay veces que sin tener lo que quieres, te da miedo perderlo.Pero no vale la pena forzar las cosas, todo ocurre cuando menos te lo esperas, como por arte de magia, para bien o para mal, te das cuenta de que nada depende de tí, que también depende de otros, eso hace que la vida sea tan curiosa.Que las cosas no tienen valor por sí solas, serán importantes en la medida que tú les des importancia.


Nunca subestimes el poder del destino, porque cuando menos te lo esperas, el detalle más insignificante puede causar un efecto en cadena que cambie el rumbo de tu vida.

Nos reímos. Y seguimos riéndonos así. Hablando sin saber muy bien de qué ni por qué. Después decidimos colgar, prometiendo que nos llamaremos mañana. Es una promesa inútil: lo hubiéramos hecho de todos modos. Cuando pierdes tiempo al teléfono, cuando los minutos pasan sin que te des cuenta, cuando las palabras no tienen sentido, cuando piensas que si alguien te escuchara creería que estás loco, cuando ninguno de los dos tiene ganas de colgar, cuando después de que él ha colgado compruebas que lo haya hecho de verdad, entonces estás perdida. O mejor dicho, estás enamorada, lo que, en realidad, es un poco lo mismo...

Es lo que hacemos todos, nos lanzamos, y esperamos poder volar, porque si no es así, caeremos como piedras. Y durante la caída nos preguntamos ¿se puede saber por qué he saltado? Pero aquí estoy, cayendo, y sólo hay una persona que puede hacerme creer que vuelo... y eres tú.